Filosofía de la sospecha es una etiqueta bastante simplificadora, pero que desde que la propuso Paul Ricoeur (1913-2005) en su libro «De l’interprétation. Essai sur Freud» (1965) ha sido usada pedagógicamente para describir el carácter común del pensamiento de Marx, Nietzsche y Freud. Los filósofos de la sospecha ponen en crisis la sociedad tradicional, tienen un amplio horizonte utópico y defienden que la mejora del individuo pasa por la transformación de la sociedad (Marx) y por la destrucción de todo cuanto impide a los seres humanos expresar su auténtica naturaleza (la alienación en Marx, el nihilismo en Nietzsche o la represión de los instintos sexuales en Freud). Los ejes de la sospecha son básicamente cuatro: la religión, la política, la sociedad y la ética.
RELIGIÓN
En lo que hace referencia a la religión, el pensamiento de la sospecha enuncia una serie de afirmaciones de tipo materialista y ateo. Para Marx, Nietzsche y Freud, en la senda abierta por Feuerbach, la verdad de la teología se halla en la antropología. Es el hombre insatisfecho, miedoso, el que crea la divinidad y no al revés: Sigue leyendo